domingo, 7 de noviembre de 2010

8 - "El Amor y Su Porque"



Y en los porque de esta vida, de esas vueltas sin salida.

Morimos como pájaros ciegos, que chocan ante el cristal sin cesar a su intento.

Es que el hecho de vernos solos en la vida, la nostalgia anida en nuestras almas con muy pocas ganas de partir.

Y en el oscuro rincón, el de las cosas perdidas, buscamos ese calor que canjeamos ciegamente por impune dolor.

Entre tantos errores que hoy, se me vuelven horrores, salgo a buscar ese fuego que aniquila sin compasión.

Cuando te dije adiós, buscó ser hasta siempre, y hoy que me encuentro tan solo se evidencia la sinrazón.

Y hoy duermo y amanezco sin vos, sin mí y sin la vida.

Dejando el tiempo que pase, nos convertimos en soñadores compulsivos.

Y en el sin fin de los porque, vivimos preguntando porqué.

Se hace ineludible el vacío en nuestras almas. La paciencia se troca por intolerancia.

Los sueños se marchitan y los deseos se vuelven inverosímiles.

Y hoy me encuentro tan solo. ¿Como hacer para no nombrarte si siempre estas presente?

No estoy muerto pero puedo advertir a los cuervos revolotear a mí alrededor.

Se agota la esperanza. Y yo que siempre fui alegría.

Entre la gente, disfrazo mi dolor y mi sufrir, pero somos sumamente frágiles cuando estamos con nosotros mismos.

Y ahora tan lejos vos y yo, y hoy tan lejos de la vida.

En mi partir no deje huellas, y las tuyas ya están casi secas.

Pero el destino ya habló. Y hoy carezco de combustible.

Es que el amor se hace de a dos, y estando solos, solo nos resta aceptar.

Y hoy ya no quiero quererte. Sigo esperando que alguien me salve.

Me bato a duelo con la soledad sabiéndome derrotado antes de comenzar.

Este destino es tan arbitrario, ya no hay estrella que me guíe.

Y hoy te hablo a ti, a todos:

Deseo que te levantes y que, al escuchar el canto de las aves, te pongas feliz por nada.

Así entenderás que en lo más profundo del dolor, cualquier razón para reír es grata.

Después de tanto dolor, se esconde la alegría. No llegaremos a ella si nos hundimos y no luchamos contra corriente.

También deseo que conozcas el desamor. Para que, cuando tengas a tu compañero/a, no intentes cambiarlo a tu semejanza.

Pues si obramos así, solo amaremos nuestro propio reflejo en ellos.

Deseo que extrañes y mas aun que anheles. Así entenderás que el tiempo a su lado es efímero si nuestro amor no demostramos.

En esta escuela del dolor, estoy intentando aprender sobre esta vida.

Sin pudor, y con demasiada incertidumbre, sigo vagando por la vida.

Sigo bien atento, esperando ladrarle al árbol indicado.

Cuantas preguntas y tan pocas respuestas.

La vida continúa, mientras te espero seguiré persuadiendo a mi corazón.

Espero que me encuentres antes que el porqué de mis porqués, y toda su incertidumbre, me devore sin llegar a conocer el veredicto del destino.

Siempre existirá un porqué en el amor.

Siempre existirá ese porqué sin respuesta.